Esta plaza está dedicada al pintor e ilustrador de Albaida, José Segrelles. En la plaza se encuentra el edificio llamado La Finca Roja.
Esta plaza está dedicada al pintor e ilustrador de Albaida, José Segrelles. En la plaza se encuentra el edificio llamado La Finca Roja.
Al parecer el nombre de esta calle le viene de un milagro de S. Vicente Ferrer, que ante una pronunciada sequía predijo que caerían gotas de lluvia tan grandes como avellanas.
En esta calle vivió por un tiempo el médico y premio Nobel, Santiago Ramón y Cajal.
En una casa de nueva construcción situada en el nº 11 de la calle y a través de un cristal, se puede ver una puerta de la muralla romana del siglo II a.C.
Este puente iba a ser provisional, en principio, debido a las necesidades del tráfico mientras que se construían el puente de la Exposición y la estación del metro de la Alameda. Después se dejó definitivamente. Fue inaugurado en el año 2002 y sus flores son constantemente renovadas.
Es el único palacio de la calle Caballeros que posee un jardín, situado al fondo del patio.
Esta corta calle une la calle Calabazas con la de Palafox y es una de las calles que rodean el Mercado Central. En el siglo XVII se llamaba calle del Gall (gallo).
A partir de 1946, el museo se traslada a su actual ubicación en el antiguo colegio de San Pío V. Desde esa fecha, hasta 1983, las dependencias son ocupadas únicamente por la Escuela de Bellas Artes de San Carlos y la Escuela de Artes y Oficios.
El Almudín fue ampliado durante los siglos XV y XVI. El edificio se empleaba para el almacenamiento y distribución de trigo para la ciudad. Su nombre viene del árabe "almud", una medida de capacidad para granos utilizada por los musulmanes en España.
Los árboles más frecuentes en el tramo VIII son aligustres, chopos, árboles de lana y arces.
En la zona más próxima al puente de la Exposición existe un campo de fútbol.
En total el Jardín del Turia tiene unos 9 km. de largo, pero algunos tramos tienen un deficiente mantenimiento.
En el año 2012 se remodelaron los jardines de la biblioteca del antiguo Hospital General.
Este barrio posee una interesante arquitectura popular de principios del siglo XX.
El barrio tiene actualmente una numerosa colonia asiática, con sus tiendas y bares. En él se encuentra también la oficina provincial del Instituto Nacional de la Seguridad Social, en la calle de Bailén.
El claustro renacentista es ya del siglo XVI.
Menos la iglesia, a partir del año 1838, el resto del convento se utilizará como Museo y Escuela de Bellas Artes.
El aspecto que ofrecían tras su construcción era distinto, ya que las tracerías estaban pintadas de color rojizo. Las claves y los arranques de las bóvedas fueron pintados por Marçal del Sax y Pere Nicolau.