La portada norte da al patio y es del siglo XIII, de estilo románico. En la clave del arco podemos ver el escudo de la Orden, que era una sencilla cruz blanca sobre fondo rojo. Sobre esta puerta se construyó más tarde un arco apuntado con un óculo en el que aparece la cruz de Malta, ya que esta orden militar y hospitalaria se llamaba en realidad de San Juan de Jerusalén, Rodas y Malta.
A la iglesia se entra actualmente por una puerta lateral situada al fondo del patio. Allí también se encuentra el museo, donde se pueden ver los objetos encontrados en las excavaciones del recinto.
La iglesia es del estilo gótico propio de la región francesa de Languedoc, con una sola nave y capillas situadas entre contrafuertes. El primer arco descansa sobre capiteles de claro origen musulmán. Fue declarada Monumento Nacional en 1943 gracias a la intervención de Elías Tormo.
Desde 1987, la iglesia ha venido siendo restaurada y devolviéndose a su gótico primitivo. Toda decoración barroca que tenía fue quitada, quedando sólo de ésta la capilla de Santa Bárbara, con sus esgrafiados de finales del siglo XVII.
Las pinturas de las capillas, aparecidas después de la restauración de la iglesia, son del siglo XIII. La iglesia estaba cubierta con cal en el interior desde el siglo XIV, esto ha hecho que las pinturas se conserven muy bien.
A esta calle el nombre le viene por los maestres de la Orden Militar de Montesa. A ella da la parte posterior del palacio del Temple, que no cambió de nombre pero, que en realidad pertenecía desde principios del siglo XIV a la Orden de Montesa, al disolverse la Orden del Temple.
Esta calle se llama así porque al final de ella, bordeando también la plaza del Poeta Llorente y la calle del Pintor López, se encontraba el convento de los Trinitarios. Este convento desapareció en el último tercio del siglo XIX por la desamortización. En su lugar se construyó un bloque de casas.
Esta calle se llama así por estar situado en ella el Palacio Arzobispal. En otro tiempo se llamó, entre otros nombres, Baixada del Bisbe (Bajada del Obispo); por la pequeña pendiente que hay hasta la plaza de Nápoles y Sicilia.
En la foto puede verse el palacio del Almirante, del siglo XV, aunque su fachada es ya del siglo XVIII. Este palacio posee interesantes artesonados góticos en el vestíbulo y en la Sala de los Escudos. También tiene un artesonado renacentista (en el entresuelo) y otro barroco (en la Sala de la Chimenea). Actualmente es sede de la Consellería de Economía y Hacienda.
El palacio se llama así porque uno de sus propietarios fue el marqués de Guadalest, que fue Almirante de Aragón (como una especie de ministro de marina de la Corona de Aragón).
A pesar de la decoración, los baños no son de época musulmana. Se trata de una concesión que el rey Jaime II le hizo a Pere de Vila-rasa para que construyera unos baños al estilo árabe y un horno. Los baños siempre se construían junto a un horno para aprovechar el calor de éste.
Estos baños fueron utilizados hasta el siglo XX y poseen un vestíbulo de entrada, una sala fría, una sala templada y una sala caliente. El cuarto de la foto es adyacente a la sala fría y disponía de utensilios para el baño y letrinas.
En la sala caliente hay una abertura que permitía tomar agua en ebullición. El aire caliente producido por la caldera se distribuía debajo del piso de la sala por una cámara de poca altura. Como estaba el piso muy caliente, la gente vertía cubos de agua continuamente, y eso generaba vapor. Aquí pasaban sólo unos minutos.
En el siglo XIX se restauraron los baños añadiéndoles una decoración neo-árabe. Cerraron en 1959.
Durante los años 1961-1963 se restauran y se elimina la decoración neo-árabe del siglo XIX. A partir de 1963 se instala un gimnasio de boxeo. En 1985 la Generaltitat Valenciana adquiere el edificio y en 1999 se lleva a cabo el proyecto de rehabilitación. En el año 2005 se abren al público para visitas.
En la foto aparece la sala tibia, donde la gente pasaba la mayor parte del tiempo.
La sala tibia es la de mayores dimensiones y está dividida en tres partes separadas por unas columnas. Tiene una cúpula octogonal sobre trompas, con tragaluces estrellados, en la parte central.